Me dispongo a hacer un análisis de un juego que seguramente ha pasado inadvertido por las estanterías de las tiendas para muchos de vosotros, pero que sin duda alguna merece una oportunidad.
Estoy hablando de «Divinity 2: Ego Draconis». En este caso, me voy a centrar en la versión para Xbox360, que es la que tengo entre manos.
Contiene algún pequeño «spoiler», así que si no queréis seguir leyendo, no continuéis, pero si estáis indecisos para pillar el juego, quizás os saque de dudas:
Temática y posibilidades
Nos encontramos ante un juego de rol de los de toda la vida, pero con matices especiales. Podremos crear nuestro personaje, con pocas posibilidades de configuración en cuanto al aspecto para ser sinceros.
Como buen juego de rol que se precie, siempre tendremos una doble moralidad en nuestras acciones.
Deberemos ir subiendo niveles a nuestro personaje para poder avanzar en el juego, y a diferencia de otros juegos, las criaturas que derrotemos, no volverán a aparecer, por lo que la experiencia, podemos decir que está limitada, pero tranquilos, que no nos faltará.
Tendremos un buen árbol de posibilidades para personalizar nuestro personaje. Quizás algo limitado comparado con otros juegos, pero ni mucho menos afecta a la experiencia de juego. Aparte, podremos subir cualidades del personaje en cada nivel, como la Fuerza, Destreza, Energía, Inteligencia y Vitalidad.
Podremos aprender habilidades de guerrero, montaraz, mago, sacerdote y matadragones, más una vez avanzemos en el juego, nos darán la posibilidad de transformarnos en Dragón, con sus consecuentes habilidades, que deberemos desarrollar a base de libros que iremos encontrando a los largo del juego.
Quisiera advertir, que al principio el juego es un poco lioso.
En la mayoría de juegos de rol, al tener una misión sabemos enseguida donde tenemos que ir, ya sea gracias a una brujula o mapa que nos indica exactemente donde tendremos que ir.
Aquí no, aquí se enfatiza la exploración para poder seguir avanzando y poder realizar misiones secundarias, algo que le da mucha vida al juego, y eso que al principio dudaba de la eficacia de este método.
Eso si, dispondremos de un mapa para conocer los lugares que hemos visitado.
Hay armas de todo tipo, desde mazas, espadas a una y dos manos, hachas, arcos, etc… cada uno con sus propiedades, y que podremos mejorar mediante encantamientos o mejoras.
Podemos equipar a nuestro personaje con multitud de complementos. Armaduras, pantalones, anillos, collares…. que al igual que las armas, pueden o no tener propiedades especiales o podemos aplicarselas.
La historía, pese a que hay momentos que no explican exactamente el porqué de algunas situaciones, engancha. No será la más original, pero a quién le guste la temática de los dragones, seguro que le da el visto bueno.
Apartado técnico:
Es aquí quizás uno de los puntos en los que más flojea el juego, y puede que tire a muchos hacia atrás a la hora de jugarlo.
Las animaciones de los personajes del juego, tanto enemigos como otros habitantes, sufren de un ligero «desfase» en comparación con las animaciones del personaje que manejamos. Digamos que es un efecto como de que los personajes van a 30fps (a tirones) y tu personaje se mueve a 60fps (normal).
Dejando de lado ese fallo, que resta enteros a estas alturas, también criticaré los movimientos del juego, muchas veces ortopédicos y que pueden dar más de un quebradero de cabeza.
Incluso cuando llega la hora de convertirse en dragón y manejarlo, se hace muy duro, podría haberse mejorado el control; supongo que algunos de estos fallos sea debido a una mala conversión de la versión de PC.
Una vez superas el trauma que genera al principio, te olvidas de todo ello.
Apartado gráfico
Uno de los puntos fuerte del juego. El motor gráfico del juego es precioso, muy colorista.
Sin embargo, en algunos momentos se ve afectado por el siempre molesto «tearing», algo a lo que uno ha acabado acostumbrandose.
Muchos efectos de hierba moviendose, árboles, una distancia de representación aceptable, el efecto del agua y las cascadas muy logrado… digamos que cumple con creces en todos estos aspectos.
Apartado sonoro:
Lo mejor del juego. Un apartado sonoro sublime. Traducido completamente al Castellano, algo que se ha de valorar mucho, después de que muchas empresas esten dando la espalda a nuestro idioma.
Una banda sonora épica, sencillamente una de las mejores que he escuchado en mucho tiempo, melodias pegadizas que no puedes evitar oir una y otra vez. Siempre he mantenido que una buena banda sonora hace mucho bien en un juego.
Conclusión
En definitiva, un título bastante notable, pese a sus defectos técnicos. Si eres un amante de los juegos de rol, este juego cumple con su cometido, y te mantendrá frente a la pantalla muchas horas, dependiendo tus ansias de explorar, sacar logros y cumplir con lo objetivos secundarios. Yo me atrevería a decir que entre 30 y 40 horas perfectamente.
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