Mass Effect: Diario de Combate (IV)

En episodios anteriores…

Después de quitarme este traje tan feo que sólo me he puesto para la foto, seguimos.

Después de salvar a Tari de los asesinos de Tari y que ella me mostrara unas grabaciones que inculpaban a Saren, debía ir a hablar con el Consejo acerca de todo esto. Quien sabe, igual ahora me hacen más caso.

Pero antes tengo que hacer una cosilla: Pasarle un disco de información que encontré en la oficina de Puño a la periodista china de cerca del Flux. Así que ahí me dirigí.

Pero me encontré con alguien por el camino.

Samesh es el marido de una difunta marine que murió en el ataque de Eden Prime. Él quería recuperar el cuerpo de su mujer, pero el ejército no se lo devolvía, y me pidió ayuda. Ya empiezo a ser famosillo.

Debía ir al bar de las embajadas, a hablar con un Oficial, para intentarle convencer de que me diera el cuerpo. Así que fui y hablé con él. Pero mis intentos fueron en vano, así que tendría que volver donde Samesh a darle las malas noticias.

Pero él se negaba a aceptarlas, y la conversación terminaba conmigo volviendo a intentar convencer al Oficial, pero el no torcía el brazo. Después volvía donde Samesh y todo se repetía.

Después de hacer esto tres veces, me cansé y me fui donde la periodista. Qué le costará a él andar hasta el bar, si le tiene al lado… Con la señorita Wong todo correcto, la dí información y ella dinero, que en tiempos de crisis siempre ayuda.

Como no tenía nada más que hacer en la Ciudadela, me fui a hablar con el Consejo de todo este tema de Saren.

El representante de la Federación de Comercio is watching you masturbate

Después de enseñarle el audio, no hay duda, Saren nos ha traicionado y debe ser perseguido. El consejo le expulsa de inmediato de los Espectros (las unidades de élite), pero no está tan segura con perseguirle por la galaxia.

Así que tras convencerlos de que yo lo haré, me hacen Espectro a mí, el primer humano que lo consigue. Incluso aparece gente por los balcones de la Torre del Consejo para ver mi investidura. Me envían en misión de capturar a Saren para que no consiga llegar al Conducto, sitio donde conseguiría que volvieran los Segadores, provocando una guerra inmensa.

Así que me voy al puerto de naves espaciales (¿astropuerto?) todo lo rápido que puedo, que no hay tiempo que perder.

Mi primer viaje como Espectro en ascensor

Al llegar al astropuerto veo que el Capitán se retira, dejándome a mí la Normandía, la mejor nave de la flota humana. Parece más un retiro forzoso que otra cosa, pero mirándolo por el lado bueno, ya tengo nave y soy dueño de mi destino.

Hablo un rato con él y me entero de que casi consiguió ser un Espectro, pero que mientras estaba a prueba, Saren hizo una matanza en un planeta y acusó al Capitán, por lo que nunca llegó a serlo. Así que quiere que de caza a Saren, por él y por la humanidad.

Mah ride

Ya dentro de la nave me dedico un buen rato a hablar con toda la tripulación que quiere hablar conmigo, para interesarme por su historia y por sus razones de estar aquí.

También me dedico a explorar un poco la nave: Visitar mi camarote, la enfermería, la sala de fumadores (donde por cierto, acabo de descubrir que tiene camas futuristas para descansar)…

Tengo una nave tan grande que hasta tiene ascensores

Después de tantas vueltas a la nave, y sin la posibilidad de correr bien (sólo lo hago en combate) voy al puente de mando, donde dirigiré todas mis operaciones y elegiré destino al que ir.

Así que por fin empieza nuestra aventura en serio. El Comandante Seppard a la conquista del universo y la caza de Saren.

¿Dónde iremos con la nave? ¿Qué nos deparará el futuro? Todo esto y mucho más, en el próximo capítulo.

Mass Effect: Diario de Combate (I)
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Mass Effect: Diario de Combate (IV)