Análisis Trackmania Wii

Hace unas semanas salió la versión de Wii de uno de los juegos de conducción arcade más divertidos y más jugados en PC, Trackmania Wii. Llevo un tiempo jugándolo y la verdad es que he quedado encantado con él. Con un planteamiento calcado al de su versión de ordenador, este juego le viene al pelo a Wii, un arcade sencillo y sin más pretensiones que ser divertido.

Trackmania en pc es un juego con unos cuantos años a sus espaldas pero se sigue manteniendo en vigor gracias a la gran comunidad que lo juega. Ahora que sale en Wii es una buena oportunidad para probarlo en consola, tanto para jugar solos como para hacerlo online, el principal atractivo a priori del juego. Porque aquí no encontraréis los mejores gráficos del mundo ni un apartado técnico de infarto. Aquí encontraréis diversión sin más, que para eso es un arcade puro y duro.

Nos plantamos en un circuito y tenemos que llegar a la linea de meta en el menor tiempo posible. Por supuesto, los circuitos no son los que puedes ver en la vida real, sino que cada uno tiene unos loopings, zonas de turbo y saltos varios más exagerados que el anterior. Y aquí está la gracia del juego, en que son circuitos bastante divertidos y que tendrás que repetir unas cuantas veces para conseguir dominarlos a la perfección y quedar el primero. Lo mejor, la tecla de reinicio rápido, para volver al principio de la carrera sin tener que andar por cincuenta menús.

Quizás al principio cueste un poco el adaptarse al control, pues se hace un poco raro, pero es fácil de acostumbrarse. Podremos jugar moviendo el mando como en Mario Kart o con la cruceta. Yo lo he jugado con cruceta, porque nunca me ha convencido andar moviendo el mando, pero se puede jugar bien con ello. Generalmente tendremos que repetir más de un tramo varias veces, haciendo la curva de una forma perfecta para no perder tiempo. Una vez controlas bien el mando esto se consigue sin problemas.

Los coches contra los que competimos son fantasmas de corredores, es decir, que no nos podremos chocar contra ellos. Simplemente hacen un recorrido en X tiempo, aunque nos sirven como referencia para mejorar nuestro crono. Esto posibilita que saquemos lo mejor de nosotros mismos en cada prueba, sin tener que andar preocupados de tener que esquivar a la gente, teniéndonos que salir de la mejor ruta para ganar. Según el tiempo que hagamos, nos darán una medalla de oro, plata o bronce, incluso de platino si lo hacemos rematadamente bien.

Pero no sólo tenemos el clásico modo carrera. También contamos con el modo Puzzle y el modo Plataforma. En el primero nos darán una pista incompleta y varias piezas con las que acabarla. Una vez hecho esto jugaremos en la pista intentando superar el mejor tiempo nuevamente, por lo que la posición en las que colocamos las piezas es esencial para tener luego alguna oportunidad. El otro modo es una carrera de obstáculos, como si de una prueba de Trial se tratara. Aquí no se valora el tiempo en recorrer la pista, sino las veces que nos caemos o que damos la vuelta al coche.

Y como podréis haber intuido por el modo Puzzle, tendremos un editor de circuitos presente en el juego. Tendremos cientos de piezas a nuestra disposición para poder montar el circuito de nuestros sueños. Nos moveremos manejando un puntero como si fuera un ratón y poniendo las piezas a golpe de click. Además, lo mejor de todo es poder subir luego nuestros circuitos a Internet para que los demás jueguen con él. Si se hace una buena comunidad, el juego se puede hacer infinito.

Aparte, tendremos la posibilidad de jugar en multijugador, tanto a pantalla partida como online. Los piques con algún amigo que tengas al lado están asegurados, y online es el juego que todos conocemos. Podemos competir con gente de cualquier lado y comparar nuestros tiempos contra los suyos. Nada nuevo, pero muy divertido.

Técnicamente, como habíamos comentado antes, es bastante normal. Los gráficos son del montón, aunque eso sí, se mueve con una fluidez pasmosa, imperativa para un juego de estas características. En el apartado sonoro nada que destacar, sinceramente. Aunque esto no significa que sea peor el juego, es simplemente que no destaca, aunque tampoco le haga falta para ser divertido.

En definitiva es un juego que aunque no destaca en ningún apartado técnico, es divertido a rabiar. Si os gusta la versión de pc, lanzaos sin miedo a esta versión de Wii porque merece la pena mucho. Tienes para horas de juego con lo que ya viene en el juego y como la comunidad crezca esto no terminará nunca. Además, tiene una dificultad un poco elevada, así que si sois amantes de los retos tendréis que jugar más para dominarlo al completo.