Uno de los juegos que más espero para el año que viene, Dragon’s Dogma, se ha mostrado en el Tokyo Game Show. No podía ser menos, dado su parecido (al menos en vídeos) con Monster Hunter, y sabiendo la locura que provoca eso en Japón.
El título tiene una pinta estupenda y esa ambientación medieval, unida a monstruos y dragones enormes, me encanta. Lo que ya no me gusta tanto es que el juego no tenga un online real, sino que mandemos a nuestro personaje a colaborar con más gente mientras no jugamos, así que nada de cooperativo.