Gears of War fue uno de mis juegos favoritos de la pasada generación y probablemente al que más horas le haya echado en mi vida, así que a la espera del cuarto estaba encantado de revivir la experiencia de los Marines Sudorosos por antonomasia con este Gears Ultimate Edition. Lo que sucedió a continuación le sorprenderá.
Nota de Topofarmer: Es posible que no queráis leer este análisis con gente delante, ya os aviso.
Como al fin y al cabo es una remasterización no voy a perder mucho tiempo comentando la base del juego, así que lo primero es lo primero; la remasterización es una burrada a nivel técnico. Han mejorado todas las texturas, la iluminación, los modelados… todo. El clásico defecto de UE3 en que las texturas tardaban años en cargar se ha eliminado de un plumazo. Parece un juego nuevo y está muy por encima de muchos creados desde cero esta generación. El resto del apartado técnico se mantiene igual, incluido el doblaje al español o el maravilloso sonido de reventar una cabeza.
Pero dejando a un lado los graficotes, hay que tener claro que estamos hablando de un juego con más de nueve años, y en ese sentido está sin retocar. Todos los defectos de control que tenía se han heredado y ahora, después de las mejoras en la saga, son mucho más evidentes. Aunque sigue siendo muy divertido, quedarse pegado a todas partes no lo es.
La inteligencia de nuestros compañeros en la campaña es la peor que se me viene a la cabeza. En mi periplo Dom, la máquina de morir, no hacía otra cosa que lanzarse a cortejar (que no disparar) a los Locust. Y mira que a ellos les da igual tener a otro humano a medio metro que van a por ti, pero siempre hay balas perdidas que lo tumban cada tres segundos. Por suerte el juego es cooperativo tanto local como online, así que recomiendo encarecidamente jugarlo así.
En el modo online tenemos todos los mapas que salieron para el original, todos remasterizados al contrario de lo que ocurría con Halo 2A, y algún modo nuevo, como un 2v2 o una versión más rápida del rey de la colina. El primer Gears era famoso por su infame código online, donde el anfitrión de la partida era Chuck Norris y el resto equipábamos pistolas de agua. Aquí han añadido servidores dedicados y aunque el cambio se nota una barbaridad no se puede decir que se haya solucionado, por ejemplo dependiendo de la partida la escopeta mata de un tiro unas veces o ni con cinco otras. Si cabe destacar la fluidez gracias a la subida a 60FPS (la campaña sigue a 30).
Gracias a la retrocompatibilidad en One, si juegas a Gears of War Ultimate antes de que acabe este 2015 recibes los tres juegos originales de 360 (y al hijo tonto, Judgment, también), lo que añade valor a los 40€ que cuesta. Además conforme vayamos encontrando las chapas repartidas por la campaña iremos desbloqueando 5 comics para conocer un poco más el trasfondo de la saga, que aunque no sean gran cosa si que es un aliciente.
Gears of War Ultimate Edition es un juegazo de hace nueve años vestido de seda, pero sigue teniendo las limitaciones del original y duele mucho perder cosas que ahora parecen básicas. Es recomendado para quien no haya jugado a la saga o les haya dedicado cientos de horas, nada de medias tintas.
3 comentarios
Topofarmer · 16/09/2015 a las 18:13
:bonfrog:
Ibrasport · 17/09/2015 a las 0:06
Me acabas de romper la ilusión. Una de mis motivaciones con One era este recopilatorio xD
kaiser77 · 23/09/2015 a las 16:35
«recibes los tres juegos originales de 360 (y al hijo tonto, Judgment, también)»
Que bueno xD. Quizás el principal problema que tiene este juego, es que teniendo 9 años, pocos juegos actuales son tan entretenidos y guapos como este.
PD: Judgment no es malo… es un juego gayola, estas aburrido, te pones y cuando terminas te olvidas :nuse:
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