Análisis Castlevania Lords of Shadow: Resurrection (DLC)

Hace un par de meses analicé Reverie, el primer DLC de Castlevania Lords of Shadow. Un capítulo descargable malo, corto, sin chicha y por el que no valía la pena soltar ni un céntimo.

Hoy hago lo propio con Resurrection, segundo y último DLC, y me alegro de poder decir que este capítulo (el XIV) sí hace honor al juego completo, una de las grandes sorpresas del pasado año.

Es un capítulo extra corto con sólo dos niveles, con bastante poco escenario para recorrer, por cierto. Pero son tan endemoniadamente difíciles que se va a hacer muy largo. E intenso, muy intenso, ya que desde el mismo principio ya empezamos a repartir leña a diestro y siniestro. Y aunque hay pocos enemigos que derrotar, sudaremos sangre para conseguir terminar ambos.

Además termina de cerrar la historia del juego, en especial el final que aparece tras los créditos, que seguro que dejó bastante confuso a más de uno. Pero sinceramente, 800 MSPoints (10 eurazos) se me antoja caro para lo que es, aunque si los gastáis os dejará satisfechos.

Tras el salto tenéis un análisis con algún pequeño -y obvio- spoiler.

El juego empieza justo donde acabó Reverie, entrando al inframundo para acabar de una vez por todas con el mal que habita en él. Y claro, para hacerlo no queda más remedio que coger el látigo y hacerlo uno mismo. No busquéis más historia porque no la hay: entramos, llegamos al malo, lo matamos, se acabó.

Con esto no quiero decir ni que sea mejor ni que sea peor, simplemente que este está enfocado 100% a la acción, ya que pocos momentos hay en los que podamos respirar tranquilos, por no decir que no hay ninguno.

Ah, y si os estáis preguntando si tenemos algún poder o habilidad nueva, debido a cómo acabó el primer DLC la respuesta es no, Gabriel sigue pudiendo hacer lo mismo de siempre. Hubiera estado bien una sorpresita en este apartado, pero nos tendremos que quedar con las ganas.

Nos encontraremos con cuatro tipos de enemigos en total, siendo uno de ellos el jefe final, y otros dos versiones mejoradas y más fuertes de malos ya conocidos. El que queda es directamente uno ya bien conocido, y con el que os toparéis nada más comenzar.

En ambas fases hay zona de plataformas, aunque sea una parte menor del nivel. Además olvidaos de la ambientación en castillos, hemos bajado al mismo infierno, por lo que todo es lava, roca y fuego.

Como ya había comentado antes, si por algo destaca este descargable es por su dificultad. No se si se debe a que andaba desentrenado (desde que me pasé Reverie hace dos meses no tocaba el juego) o que directamente la palabra complicado ha tomado un nuevo significado, porque me han matado mil veces, llegando a tener ganas de tirar el mando por la ventana.

Sobre todo cuando estamos peleando contra el jefe final, que hasta que le he pillado el tranquillo y se han alineado los astros, no he podido acabar con él. Han sido muchos intentos, y ha sido posible gracias a los puntos de control en mitad de la pelea, pero la sensación después de tanta desesperación ha de subidón total.

Como veis, es todo lo contrario a lo que fue el primer DLC, acercándose al juego original, pero con más intensidad. Es muy bueno, y aunque es corto, la tremenda dificultad lo compensa, así que no es apto para los que se rajan ante un desafío en condiciones.

Pero aun así, no creo que valga los 10€ que he pagado, ya que se pasa en un par de horas, pasando el 80% de ese tiempo en la lucha contra el jefe final. Aunque aquí entra ya el criterio personal de cada uno. De todos modos, si os decidís a haceros con él, no os va a defraudar.

Creo que se debería de haber publicado un sólo DLC con los tres capítulos de Reverie y los dos de Resurrection juntos. A este mismo precio el pack doble sería una compra casi obligada, pero comprarlos por separado es soltar el dinero muy a la ligera.