Análisis Monster Hunter 3 Ultimate (Nintendo 3DS y Wii U)

Tengo que reconocer que cuando empecé a jugar a Monster Hunter 3 Ultimate no tenía ni idea de la saga. La conocía por encima pero nunca me había puesto con ello, así que todo para mí es nuevo aquí. Como Adripillo ya os ha contado qué tal el juego me parece un poco tontería repetirlo, así que mejor escribo un poco mi historia personal de caza.

El tener el juego tanto en Wii U como en 3DS ha sido toda una bendición, porque al poder pasar la partida de una consola a otra podía seguir jugando aunque no estuviera en casa. Bueno, no es que pudiera seguir jugando, es que necesitaba seguir jugando. Como todo, el principio no era un sueño, pero todo esto ha terminado en una espiral de adicción de la que no sé si quiero salir.

Como el juego salió justo cuando empezaba la Semana Santa para mí, estuve un par de semanas con la versión portátil, a la que metí una buena decena de horas (pasándome el Luigi’s Mansion 2 entre medias). Había oído que el control era un poco… tosco, por decirlo suavemente, pero a mí no me pareció nada de eso. De hecho al poco de jugar me parecía bastante cómodo y jugaba perfectamente.

Como imaginaréis, teniendo sólo acceso a la versión portátil me pasé unos días yendo de caza solo. Como era mi primera experiencia pues iba encantado de la vida y la verdad es que me lo pasaba estupendamente. Cosas como matar un Gran Jaggi (el primer monstruo mediano del juego) me parecían ya un reto, así que me mantenía pegado a la pantalla para seguir avanzando. Ahora es un juego de niños, claro, pero siempre hay un comienzo.

Casi para cualquier cosa que necesitemos, como armaduras o armas, hay que andar matando repetidamente a ciertos tipos de monstruos para conseguir ciertas recompensas. Pero el caso es que no se me hacía aburrido, porque cada combate era diferente y seguía siendo divertido. Yo seguía volviendo a la misma misión para matar una y otra vez al mismo monstruo, para conseguir mi primera armadura. Ya estaba listo para avanzar.

Y así pasaron los días hasta que volví a jugar con Wii U, y aquí fue donde cambió todo.

Si el juego ya me parecía divertido en portátil, en sobremesa todo cambió para bien. Desde el control hasta el verlo en pantalla grande, pasando por lo más importante, el juego online. Esto sí que fue lo que cambió mi perspectiva con respecto al juego, para mejor incluso.

Sigo teniendo misiones individuales en la aldea, pero las tengo un poco abandonadas. Debería hacerlas, pero es que jugar con más gente en línea, ayudarnos y acabar con todos los monstruos antes es mucho más gratificante y divertido.

Por poner un ejemplo, para terminar mi armadura de Lagiacrus necesitaba un objeto con un drop del 2 al 6%, por lo que leí en la Monster Hunter Wikia. Daba igual, me uní a un grupo de amables guiris y matamos al Leviatán de agua unas 20-25 veces hasta que conseguí la pieza. Lo hacíamos rápido, y aunque los combates en el agua no son mis preferidos, quería seguir haciéndolo porque me lo seguía pasando bien. Por supuesto terminé la armadura.

Unos días más tarde un amigo se compró la Wii U por este juego, y le ayudaba a terminar las misiones de rango bajo para así avanzar más rápido y estar a la par. Y aunque para mí sean más sencillas porque ya pasé por ellas hace tiempo, el buen rato cazando juntos y ayudándonos a matar bichos sigue estando ahí.

Sigo jugando cada día. Ayer mismo me estuve hasta las 4 de la mañana jugando con un francés, un alemán y un inglés. Y aunque parezca un chiste, esa es mi historia cada día. Y lo seguiré haciendo, mejorando cada día un poco más y desbloqueando misiones de más nivel, porque aun con varias decenas de horas sigo siendo un novato y quiero seguir mejorando.

Por lo que he oído Monster Hunter 3 Ultimate tiene un nivel de dificultad menor al principio del juego, haciéndolo más accesible a los nuevos jugadores, aunque luego tenga las misiones de rango más alto para los más expertos. A mí eso me ha venido de perlas porque me ha permitido entrar al mundo MH sin muchas complicaciones iniciales.

El que quien mejora sea el jugador y no el personaje es una de las cosas que más me han gustado. Adiós al subir de nivel y al pensar en cómo mejorar los atributos. Yo lo que quiero es cazar monstruos y cada día lo hago mejor.

En definitiva me está encantando el juego. No lo digo en pasado porque sigo jugando, y cuando termine estas líneas seguramente vuelva. Con tanto monstruo, tantas misiones y con gente para jugar acompañado tengo juego para rato.

Creo que ya entiendo el nivel de adicción que tiene la gente por este juego. Una pena que la comunidad occidental no sea más grande y este juego sea minoritario. Aunque supongo que será porque requiere un mínimo de habilidad y ganas de mejorar y es algo que espanta a más de uno.

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