Análisis Mario Kart 8 (Wii U)

A estas horas qué os voy a contar de Mario Kart 8 que no sepáis ya. Muchos se han comprado una Wii U por este juego y los que ya la teníamos lo esperábamos como agua de mayo. ¿Pero ha sabido mantener el tipo con las altísimas expectativas que había detrás? Pues sí, y sobrado además.

Podría terminar este texto con una sola frase: Mario Kart 8 es el mejor Mario Kart hasta la fecha. Pero claro, quizá sea un poco escaso terminar sólo así, aunque al final todo va a girar sobre la misma idea. Nintendo se ha vuelto a superar y ha conseguido contentar tanto a los fans de la saga como a los que hacía tiempo que no la tocaban y ahora vuelven.

El reto era bastante alto porque tras meses y meses de desarrollo la espera debía merecer la pena, y más cuando todos esperábamos el juego para finales de 2013. Y vaya si lo ha hecho. Mario Kart 8 es la enésima joya que Nintendo lanza para Wii U, donde está claro que aunque las ventas no acompañen, la calidad ha ido siempre in crescendo, con otros juegos como New Super Mario Bros U, Pikmin 3, Super Mario 3D World o Donkey Kong Country Tropical Freeze.

Esta nueva entrega sigue la tónica de los últimos juegos, con los cuatro torneos con cuatro nuevos circuitos y los cuatro clásicos con los correspondientes circuitos retro. La selección de los antiguos es bastante buena, quizá exceptuando la Autopista Toad que es más aburrida que nunca. Pero están en su mayoría bien adaptados y como guinda final la Rainbow Road de Nintendo 64, que como único punto negativo es el que se haya acortado a una sola vuelta con tramos.

Pero lo mejor sin duda son los circuitos nuevos. Echando un ojo ahora mismo creo que no hay ninguno que no me guste, porque todos destacan en algo y todos están acompañados de una música genial. Música de la que ya os hablé otro día, por cierto, así que echadle un ojo.

La antigravedad, gran novedad del juego, no es un cambio radical pero sí le da un punto extra a los circuitos. Crea más caminos alternativos por las paredes y techos, pero se ha implementado de una manera muy natural.

Y hablando de los circuitos, los grandes protagonistas del juego, la cantidad de pequeños detalles que hay desperdigados es infinita. Vídeos como este de BitBlock o de GameXplain son buenas recopilaciones de lo que hablo. Son miles de guiños, de secretos y de detalles que quizá no veamos, que seguramente no veamos, pero que están ahí y hacen mejor al juego. Este afán por el detallismo y la perfección de EAD es la marca de la casa. Ya pasaba en otros juegos, pero aquí se han superado y los escenarios están más vivos que nunca. Incluso algunos circuitos están conectados unos con otros a través de carteles, lo que es ya la rehostia.

Si hay algún pero que ponerle en el apartado de los circuitos, y seguramente a todo el juego, es que ahora el modo Batalla no transcurre en pistas especiales, sino en las normales de correr. Eso hace que las batallas sean más lentas porque más de una vez tocará recorrer todo el nivel para encontrarse con alguien, haciéndolo menos loco que otras veces. Es sin duda un punto negro en el título y que espero que arreglen aunque sea vía DLC.

El plantel de personajes quizá peque demasiado de tener muchos bebés o los Koopalings, o por tener a Peach de Oro Rosa (en el online gusta bastante), pero aunque haya algunas bajas notables se han podido suplir sin demasiados problemas. Yo he echado de menos a Huesitos, pero tampoco es un drama. El caso es que está Waluigi, así que todo correcto.

El resto, como decía antes, es bastante redondo. Se ve que se han esforzado en nivelar las cosas y balancear poderes y personajes, igual que se ve también que ya el juego ha dado el paso definitivo a «forzar la competición», haciendo que aunque seas el último siempre tengas posibilidades de ganar. A algunos les gustará más y a otros menos, pero es ya una realidad que difícilmente se va a ir.

Aun así el juego siempre es divertido y sin el ir primero toda la carrera y en la última curva pasar a ser el décimo ya no sería Mario Kart. La saga es la locura hecha carrera y por muchos gritos que pegue a las tantas de la mañana acordándome de toda la familia de algún rival, esto es lo que busco y lo que me divierte.

Y si además de todo lo anterior dicho, a nivel técnico es una pasada tanto por efectos como por la fluidez del juego. No sólo jugando solos, también jugando online el juego va como la seda y las comunidades se han mejorado con respecto a la séptima entrega.

Como he dicho al principio, Mario Kart 8 es el mejor juego de la saga, ya sea por lo genial que es gráficamente, por lo bien que va el online, por lo buenos que son los circuitos o porque es más divertido que nunca, o seguramente por una combinación de todos. Su único punto en contra es el modo Batalla, que usa los circuitos normales y no unos especiales más pequeños.