Análisis OlliOlli (PC)

Desde siempre los juegos de skate han sido un clásico en los videojuegos. Pero a medida que avanzaba la tecnología, también los juegos se iban haciendo más complejos, alejándose más del arcade puro y duro de sus comienzos. Y por ahí va OlliOlli, un juego que hace mucho con muy poco.

OlliOlli es un juego de skate con una simplicidad llevada al máximo. Simplemente tenemos un botón que sirve para darse impulso y aterrizar, y un stick (o WASD si no tenemos mandos) para ejecutar los trucos con la tabla y grindar por los raíles. Y ya está, no necesitamos más que esto y un buen timing para encadenar puntos y combos.

Al principio los controles pueden ser un poco liosos, porque hay que pulsar una dirección (o direcciones) del stick para prepararnos y hasta que no soltemos no hace el truco, pero es cuestión de habituarse. Al principio no hacía más que fallar todo porque me salía jugar como hacía en los Tony Hawk, pero una vez nos quitamos eso de la cabeza, las piruetas salen solas. Y claro, el hacer bien todo y que nos den puntos dependerá de cómo hemos aterrizado. Simplemente hay que pulsar la tecla de aterrizaje en el momento justo para conseguir un perfecto, y lo mismo para grindar.

Como he dicho, el juego es extremadamente simple, desde sus controles a los gráficos, pero con ello consigue hace un juego divertido y con un sistema de trucos y combos bastante majo.

Obviamente el juego no iba a ser sólo hacer trucos sin ton ni son. Podremos ir abriéndonos paso por distintos niveles, cinco por escenario, a medida que vamos cumpliendo objetivos y llegamos a la meta sanos y salvos (si nos caemos una vez acaba el nivel). Los objetivos van desde el clásico haz X puntos o haz un combo de un mínimo de puntos o de multiplicador, a coger objetos, hacer un truco en especial o terminar el nivel con unas restricciones dadas (como no hacer trucos de menos de 1000 puntos).

No son muy largos los recorridos, pero son todos diferentes y centrados más o menos en los grinds. Al final todo está colocado para favorecer buenos combos y que todo fluya bien, y lo consigue. Además se añaden otros tantos niveles de dificultad Experto y unos Spots para intentar conseguir la mayor puntuación usando sólo un combo.

Luego todas las puntuaciones que hagamos se suben a unas tablas globales, para ver hasta dónde somos capaces de llegar.

OlliOlli es un poco un Canabalt pero con un monopatín. El ritmo es muy similar, avanzando siempre sin parar, sólo que ahora añadiendo el hacer unos cuantos trucos de por medio y con más obstáculos. Y al igual que en el runner de los tejados, aquí el reiniciar está a la orden del día y esto lo sabe el juego. No ya porque sea prácticamente instantáneo, sino porque en la versión de Vita (en esta de PC no tanto, al tener una pantalla más grande), es imposible no ver el botón.

Cada partida que juguemos va a ser cortita sí o sí, ya sea porque nos caigamos o porque acabemos, de forma que ni reiniciar es un drama ni nos vamos a aburrir de tener que estar siempre en el mismo sitio. Sí, lo suyo seguir y seguir hasta completar los desafíos de cada pista, pero no es algo que sea tedioso ni mucho menos. Al contrario más bien.

Por supuesto se puede jugar con teclado, pero lo recomendable es hacerlo con un mando de consola. Incluso te lo dice el propio juego. Yo he usado mi DualShock 4, que me lo reconoce el PC sin hacer nada, y he jugado mejor imposible.

Como decía al principio OlliOlli hace mucho con muy poco. Es un juego aparentemente simplísimo y que con simplemente un botón y un stick nos va a dar un montón de horas de juego. El un arcade puro y duro, de los de empezar a jugar rápido y mejorar cada vez que jugamos.

Sencillo, rápido, directo y divertido. Uno de esos juegos que siempre deberías tener en el PC o la consola para quemar el tiempo libre.