Este análisis viene con un poco de retraso, y este humilde servidor se disculpa. Hoy os traigo la inverosímil mezcla de dos franquicias icónicas en términos de rol japonés: Etrian Odyssey y Mystery Dungeon. No parece que vayan a cansarse con la tendencia de mezclar Etrian Odyssey con otra cosa. Aun así, cuando desvelaron detalles sobre el juego, no podía contenerme del regocijo que suponía unir mi videojuego favorito con otra serie que he disfrutado en múltiples ocasiones. Tras el salto, el análisis de un juego que he sabido disfrutar pero que me resulta difícil recomendar.
ATLUS está que lo parte últimamente. Y este 2016 viene marcado como el año en el que todas sus franquicias más importantes harán aparición con entregas nuevas, junto a títulos que aún estar sin anunciar. Espero como agua de mayo el lanzamiento en occidente de Odin Sphere: Leifthrasir, ahora que tengo una PS Vita, y además me gustaría poder hincarle el diente algún día a Persona 5. Suerte la mía que mi motivación en la vida sea tener consolas de Nintendo. Pero no nos salgamos del tema que nos concierne.
Estamos ante la unión de dos franquicias con aspectos muy similares: ambas llaman al género clásico de exploración de mazmorras, pero desde perspectivas diferentes. ¡Y no hablo de primera o tercera persona! Etrian Odyssey recompensa a los jugadores que confían en la planificación previa, en formar estrategias interesantes y a los que ponen a punto sus sentidos de la paciencia y cautela. El juego, además de estructurar todos los aspectos de su aventura en múltiples menús, les hace entrega de un papel en blanco donde hay que reflejar lo que se observa en el mundo de la pantalla superior. En este sentido, Etrian es un juego tradicional estable: tienes todo un mundo desconocido por descubrir ante tus ojos, pero no va a cambiar. Progresar en el juego es un proceso lento, pero realmente motivador y satisfactorio.
Por su parte, Mystery Dungeon se guía con reglas muchísimo más sencillas. Solo has de tener en cuenta lo siguiente: los enemigos se mueven y actúan a tu mismo ritmo, cada vez que entras a una mazmorra todo será diferente, y todo lo que lleves dentro lo perderás si mueres en ella. Aquí entra en juego un aspecto de organización de objetos, puesto que solo puedes llevarte un puñado. Mystery Dungeon enseña que la aleatoriedad es divertida, y que merece la pena jugarte la vida en un segundo. Podrías perder todo lo que tienes, sí, pero también puede que los enemigos la líen y se suiciden entre ellos, ¡o que encuentres un arma dopada!
En las líneas iniciales del análisis dije que me resultaría difícil recomendar Etrian Mystery Dungeon. Es un juego muy peculiar, y por ello querría comentar antes todos los aspectos negativos, porque son verdaderamente frustrantes. ¿Qué es lo que hace diferente a este juego con respecto a, digamos, los Pokémon Mundo misterioso que tanto éxito han cosechado? ¡Si los han hecho la misma gente! Pues veréis, lo resumo en una palabra que yo mismo he acuñado: sobrecomplicación. Spike Chunsoft ha querido introducir absolutamente casi todas las características de las dos series. En parte esto es bueno, porque presenta una gran variedad, pero lo trataremos más adelante.
El árbol de selección de habilidades de Etrian está presente y pueden seleccionarse a tu antojo, además de programarse a diferentes combinaciones de botones, pero el proceso resulta tedioso y poco eficaz. Tenemos la organización de objetos, organización de habilidades y también la de habilidades límite. Teniendo en cuenta que llevamos a cuatro héroes al laberinto misterioso y que solo controlamos a uno a la vez, hay que poner demasiada fe en la poca inteligencia artificial del resto cuando no los manejamos. Y al final del laberinto, ¿qué nos encontramos? Que hemos cumplido la misión que nos habían encargado y hay que volver al pueblo que, sorprendentemente, está a medio construir y tendremos que pagar con nuestro dinero para que las tiendas ofrezcan mejores servicios. A mis ojos, esto presenta una limitación con respecto a los Etrian originales, que simplemente hacía falta facilitar los materiales y pagar por el producto, o encontrártelo por el suelo o comprarlo a mercaderes aleatorios de Mystery. Por lo pronto, es así como queda el juego: en procesos repetitivos, ir y volver, hablar con un personaje, pagar el pato y maldecir a los PNJ.
No pongáis esa cara tan larga, que haya sido tan crítico no significa que el juego sea un desastre. Es, por muy gracioso que suene, muy adictivo y resulta fácil coger la consola, entrar al laberinto, repartir mamporros y divertirte en el proceso. Hay una gran selección de clases procedentes de los Etrian anteriores, más una extra que es el sello personal de Spike Chunsoft con su Wanderer. Tener a las clases de los juegos anteriores me ha servido para sentirme como en casa y seguir imaginando las aventuras de mis personajes recurrentes: Alexander el príncipe, Yuna la ninja, Fabio el médico, Runica la hechicera, Celestina la soldado, Siegfried el paladín y Alice la tiradora. ¿Qué dirían? ¿Cómo se enfrentarían ellos al laberinto misterioso? ¿Cuáles son sus motivaciones para luchar? Da lo mismo. Sí es importante saber que todos se controlan de forma similar, pero hacen uso de habilidades muy diversas que cambian completamente tu forma de actuar. No usarías a un tirador o a un hechicero a un cuadro de distancia, o no querrías tener a los paladines lejos para que no reciban los impactos fuertes.
Lo que más me ha fascinado del juego es el apartado visual y sonoro. En general peco un poco de tendencioso porque Etrian ya me encanta gráfica y musicalmente, pero cualquier crítico imparcial diría que los diseños de los escenarios y personajes son espléndidos, y que la música es soberbia. No sé quién ha diseñado esta vez los personajes, pero sé que están basados en los de Yuji Himukai. Ha sabido calcar bastante bien su estilo sencillo y adorable que contrasta con la brutal dificultad del juego. La música, por supuesto, son todas composiciones originales y orquestadas de Yuzo Koshiro procedentes de los Etrian anteriores, más unas cuantas nuevas para la ocasión. Aquí me gustaría comentar que, al llegar al primer jefe del juego y escuchar el tema de batalla, sentí un escalofrío que llegó a calarme los huesos, pero que también logró motivarme para enfrentarme al enorme enemigo que tenía al frente. Los turnos en este tipo de batallas son diferentes, porque controlas a todos los personajes por turnos, pasito a pasito, algo que añadió mucha más tensión a la batalla y que agradecí enormemente.
Como jugador experimentado, he sabido perdonar la «sobrecomplicación» que envuelve a Etrian Mystery Dungeon y lo he disfrutado tanto o más que las entregas principales de la serie. Es diversión genuina de cabo a rabo, y si tú también puedes perdonar estas imperfecciones, el juego es una compra asegurada que te ofrecerá más de 35 horas de aventura. Sin embargo, creo que no es el mejor juego que presentar a alguien nuevo a ninguna de las dos franquicias. Persona Q sí supo unir lo mejor de los dos mundos sin despeinarse, pero para este caso recomendaría, sin cachondeo de por medio, cualquiera de los Pokémon Mundo misterioso.
1 comentario
MarT · 15/01/2016 a las 20:07
A este quería echarle un ojo, porque los Pokémon Mundo Misterioso de 3DS no me han hecho mucho tilín. Aunque no he jugado al último. Y este estará barato en año/año y medio.
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