Análisis de Lost Horizon (PC)

Hacía tiempo que no jugaba con una aventura gráfica, y quizás la ambientación de este juego es lo que me hizo decantarme a jugarlo. Con un toque Indy (de Indiana Jones, no de los desarrolladores perroflauta) total, las aventuras de Fenton Paddock en Lost Horizon me han encantado.

Tenía dudas acerca de si me iba a volver a enganchar a un juego así, que requieren tanto tiempo, pero no ha habido problemas. Lo he cogido de principio a fin sin soltarlo. Y aquí están mis impresiones.

La historia se sitúa en en 1936, con Hong-Kong como punto de partida. Encarnamos a Fenton Paddock, un ex-soldado que fue expulsado del ejército tras una revuelta popular y que ahora vive como transportista aéreo. Pero las cosas cambian cuando se entera de que uno de sus mejores amigos ha desaparecido en el Himalaya (casi sin explorar aún) en circunstancias misteriosas. Así que no hay tiempo que perder, tenemos que ir a rescatarlo.

Por esta aventura no andaremos solos, sino que nos acompañará Kim, la nieta de un viejo amigo que hacía mucho que no veíamos. Y es que no vamos por un camino de rositas precisamente, ya que viajaremos por sitios como Marruecos, la India o la Alemania nazi, que se encuentra ahora en medio de las Olimpiadas de Berlín 1936.

Y es que los nazis están detrás de un misterio, y parece que nuestros caminos están obligados a cruzarse más de lo que desearíamos. Pero a base de ingenio y point’n click iremos avanzando por el juego.

Gráficamente el juego se podría dividir en dos partes:

Una primera, los escenarios, que son muy bonitos y cuidados. Parecen cuadros pintados a mano sobre los que se desarrolla la acción. En sitios exteriores es donde mejor se puede observar, como el paisaje de montaña o el desierto. Todos escenarios con gran detalle, y un gustazo para la vista. Es quizás de lo mejor del título, y pocos juegos son así.

La segunda, los objetos y personajes, que están modelados en un 3D que se nota que resalta en el conjunto. Pero aun así, tienen un ligero look cartoon que hace que no sean excesivamente cantosos, y contribuye al buen ver general que tiene el juego.

Las imágenes que acompañan al análisis las he tomado yo mientras jugaba, así que pinchad en ellas para verlas con más detalle.

El juego viene doblado en inglés, aunque sí que están traducidos todos los textos, lo cual es necesario para un juego de este tipo. Las voces son correctas sin más, a veces un poco forzadas, pero no cumplen con el objetivo.

Como habíamos dicho antes, el juego es un point’n click de los de toda la vida. En esta ocasión se reserva el botón derecho para la acción de observar, y usamos el izquierdo para usar cosas, combinar objetos, movernos… Además, si nos quedamos atascados, podemos pulsar la tecla espacio, de modo que se nos indicarán en pantalla todos los objetos «clickables», aunque no nos dirán que hacer, lo cual es bueno (si no hay trampa no hay tentación).

Y hay una cosa que me gustaría destacar del juego, y es su humor y sobre todo sus referencias a clásicos del género, tanto juegos como películas. Cosas como «Mira, detrás de ti, un dragón de tres cabezas» o «Es la cabeza de dragón más grande que he visto en mi vida. No, espera, es la SEGUNDA cabeza de dragón más grande que he visto en mi vida» hicieron que sacara una sonrisa y me acordara de los grandes del género.

Y no solo esto, la escena inicial del juego, con una cantante haciendo un espectáculo en un bar de Hong Kong es toda una referencia a la escena inicial de Indiana Jones y el Templo Maldito, así como las escenas de viaje entre países, con la línea roja característica atravesando el mapa.

Pero no todo es de color rosa, ya que uno de los grandes defectos del juego es que no es difícil para nada. Los puzzles son bastante sencillos en general, aunque sí que hay alguno en el juego que hará que nos rompamos la cabeza sin saber qué hacer. En casi todo momento sabremos qué hay que hacer y a dónde tenemos que llegar, lo que nos faltarán serán simplemente los pasos intermedios.

Decir ya como final que está basado en la novela del mismo nombre, de James Hilton, que luego tuvo una adaptación en 1937 al cine de la mano de Frank Capra. Está desarrollado por Animation Arts, quienes ya hicieron los juegos de la saga Secret Files.

En definitiva, recomiendo mucho este juego a quienes os gusten las aventuras gráficas, porque a mí me ha conseguido enganchar de principio a final, y eso es algo que en esta generación pocos juegos lo han conseguido. Pero me parece un buen juego y que puede hacer que paséis unas cuantas horas ayudando al bueno de Fenton en su búsqueda.

De todas maneras, si queréis probarlo antes de comprar, aquí tenéis una demo en español.