Análisis Etrian Odyssey IV: Legends of the Titan (Nintendo 3DS)

Cinco años han pasado ya desde que llegara la primera entrega de Etrian Odyssey a Europa y no se volviera a saber nada de ella. Ahora la saga vuelve al viejo continente con Etrian Odyssey IV: Legends of the Titan. Llegará este viernes 30 (el 5 de septiembre a la eShop), pero os voy contando ya qué tal.

La trama gira en torno al Yggdrasil y cómo aunque está presente para la gente Tharsis, nadie se ha atrevido a explorarlo todavía. Ahí entramos nosotros, empezando nuestra aventura camino al árbol y explorando los terrenos, cuevas y laberintos que hay por el camino.

Por supuesto para salir a ver mundo tenemos que formar una Hermandad de Exploradores, así que nos ponemos a ello eligiendo clase, sexo y aspecto de cada integrante y una vez listos nos embarcamos ya en nuestro dirigible y nos vamos a investigar.

Si no conocéis la saga, es un dungeon crawler en primera persona con un mapa formado por cuadrículas. Estos son juegos de tener una hoja milimetrada en la que ir dibujando un mapa, algo que por suerte se soluciona bien con la pantalla táctil de la consola. A medida que avancemos se irá descubriendo el terreno en el mapa, aunque nosotros podremos ir pintando sobre él cuando queramos, para dejarlo claro y a nuestro gusto.

Toda la exploración que hagamos dentro de los laberintos y mazmorras es en primera persona. Los monstruos pequeños aparecen de la nada, aunque tenemos un indicador de proximidad que se va poniendo rojo según se acerca un combate. Lo que sí veremos son los enemigos más grandes (FOEs), que se mueven a cada paso que damos.

Los combates también son en primera persona. Mientras que en cada turno aparece el sprite de nuestro personaje a la hora de elegir su movimiento, como novedad ahora los enemigos están hechos todos en 3D, dejando atrás los sprites de otras entregas.

Puedo entender que por cómo está hecho el juego, tire a más de uno para atrás. Si nunca se ha jugado a un RPG en primera persona se hace un poco raro al principio, pero a nada que juegas un poco terminas acostumbrado. No es tan espectacular como en tercera persona, claro, pero está mucho más enfocado al gameplay en sí. Las batallas son rápidas y centradas exclusivamente en el sistema de juego, algo que a mí personalmente me gusta.

Aun así, el juego es muy bonito, los sprites de los personajes y NPCs están muy bien y los monstruos lucen bien, sobre todo los jefes finales. La estética también alejará a alguno, porque la gente es así, pero no deberíais dejar llevaros por las apariencias.

A pesar de que si tiene colorines, de que si hay niñas pequeñas y demás, es un juego muy difícil (aunque incluye un modo Casual), que requiere mucha paciencia y que no perdona. Vamos, que seguramente sea mucho más hardcore que la mayoría de juegos ahí fuera, aunque no lo parezca.

Para poner la guinda al pastel está la banda sonora. Hay un buen montón de buenas canciones, pero sin duda me quedo con la canción de las batallas normales, que aun escuchándola cada dos por tres, me sigue pareciendo una maravilla.

El juego está completamente en inglés, y quizá sí haya que tener cierto nivel para entender a algunos personajes, como a Wynne la herrera y su acentazo sureño. Aun con todo, me parece una traducción muy buena, con grandes diálogos y situaciones que nos dejarán un poco descolocados.

Etrian Odyssey IV: Legends of the Titan, más allá de su posible apariencia, es un dungeon crawler difícil, largo y muy divertido. Aunque la estética diga lo contrario, es un juego complejo y para el que hay que tener paciencia. Si tenéis ganas de algo hardcore de verdad, echadle un ojo porque es adictivo.

No es un juego para todos los públicos, pero si nunca habéis probado y tenéis ganas es una ocasión perfecta para iniciarse en la saga, porque incorpora además un modo Casual con la dificultad reducida.