La nueva aventura de Link y, ahora sí, compañía ha llegado a Wii U de mano de Tecmo Koei y con el nombre de Hyrule Warriors. Y aunque a grandes rasgos sea un Dynasty Warriors con un aspecto de Zelda, se han sabido implementar bien ambos universos en un mismo juego, y ahora os cuento por qué.
Cuando se anunció Hyrule Warriors allá por diciembre a todos nos pilló por sorpresa. Y la verdad es que lo que enseñaron era un poco feo, así que empezaron los lloros que han seguido hasta la salida del juego cuando, irónicamente, toda esa gente que lloraba porque estaban destrozando Zelda ahora está encantada con el juego.
Esa ha sido básicamente la tónica de la experiencia con este nuevo título, y aunque tenían mi confianza desde el primer momento, la verdad es que el juego ha mejorado una barbaridad desde su anuncio. Han ido apareciendo nuevos personajes jugables, nuevos mapas, nuevos modos de juego, DLCs gratuitos, unos DLC de pago a buen precio… AL final ha quedado un juego bastante redondo que se irá ampliando estos próximos meses.
¿Pero esto al final qué es? ¿Un Dynasty Warriors con un skin de Zelda? Pues sí y no, porque es mucho más que eso.
La base del juego es el mata-mata por excelencia: estamos en un escenario en el que hay miles de enemigos a los que matar, capturamos y protegemos las bases del mapa y al final matamos a un boss con una mecánica especial, para pasar al siguiente nivel. Realmente no es nada nuevo, pero me gusta la forma en la que han metido ese toque de Zelda dentro.
No es ya sólo que los protagonistas y enemigos sean obviamente personajes de la saga, es que por ejemplo los bosses salen también de otros juegos, incluyendo la forma de matarlos. ¿Quién no se acuerda de tirarle bombas a la boca al Rey Dodongo de Ocarina of Time para debilitarlo? Pues imaginad cómo se mata aquí. Me ha parecido un detalle genial.
Durante el desarrollo se hablaba de incorporar estas mecánicas clásicas a un tipo de juego que poco tiene que ver. Tenemos paredes y rocas que se rompen si tiras una bomba, fuentes del Gran Hada, zonas elevadas a las que hay que subir con un gancho, un arco o bumerán para atacar a las Babas Deku… Pequeñas mecánicas a las que estamos acostumbrados en los juegos principales de la saga que está bien ver aquí también, para darle algo más de «esencia».
Hyrule Warriors es el fanservice puro para los fans de la saga. La historia no tiene ningún sentido (tipa mala se enamora de Link, Link pasa de ella, tipa mala trae enemigos de toda la saga, Link mata gente mala) pero es que tampoco lo necesita. Lo que todos buscamos es controlar personajes que no haríamos en otros juegos y matar mucho, y todo ello envuelto con un lacito de Zelda. Y eso es lo que el juego ofrece.
Se nota que esta vez Team Ninja ha metido mano, porque a ese fanservices zeldero se le une el fanservice por el que es famoso el estudio. Aun así, los diseños de personajes son bastante geniales y tienen una buena coherencia entre ellos. Incluso Lana o Cya, personajes inventados para esta entrega, tienen su sitio. Seguramente no las volvamos a ver nunca más, pero no me ha parecido que sobren aquí.
Gráficamente hace lo que puede. El apartado artístico ayuda a que aguante el tipo, pero tiene sus ralentizaciones cuando hay muchos enemigos en pantalla o lanzamos algún ataque gordo. Por suerte no me han parecido para tanto y desde luego no me arruinaban el resto.
Y si algo necesitaba el juego era una música acorde y aquí no podría estar más contento. Las versiones de temas clásicos que hay en el juego son todas geniales y podría estar horas escuchándolas. El que el juego no tenga voces, algo habitual, hace que las escenas de vídeo queden un poco raras con las cajas de texto, pero si Zelda necesita ya voces es otro tema.
Y si en algo destaca es en la enorme cantidad de juego que hay. No es ya sólo que la campaña dure un montón de horas (y eso que se puede jugar cada nivel con varios personajes), es que hay muchísimo más de lo que rascar.
El modo Aventura es lo más interesante de todo. Tenemos un mapa gigante dividido en una cuadrícula por la que avanzaremos superando niveles y desafíos, y según la puntuación que consigamos abrimos un camino u otro.
Aparte de conseguir nuevas armas y mejoras, también encontramos objetos como bombas, velas o guantes de cavar, que si usamos luego en el mapa desbloquearemos secretos. Zelda 1 en estado puro.
Imagino que Hyrule Warriors habrá sido una sorpresa, para bien, para la mayoría de los que lo han jugado, y para mí también. Tiene muchísimo contenido, fanservice de Zelda a raudales y es adictivo, que es lo importante. Sí, puede ser repetitivo y técnicamente va justito, pero esa capa de pintura que le han puesto por encima hace maravillas.
El juego quedará como un experimento curioso mezclando dos sagas a priori muy diferentes pero que han sabido mezclar bien. Desde luego ha valido la pena.
4 comentarios
nmlss · 07/10/2014 a las 19:37
Me resulta curioso que en los dos análisis que he leído sobre esta cosa no he visto ninguna referencia a su dificultad…. y en la mayoría de capturas que aparecen en Miiverse o análisis el jugador suele tener los corazones al máximo siempre. ¿Es tan absolutamente fácil como parece en los trailers donde los enemigos se quedan mirando a Link o es cosa mía?
Topofarmer · 07/10/2014 a las 19:52
@nmlss
En nivel Normal es sencillito, pero en más de una ocasión me ha tocado salir por patas a buscar corazones porque al boss de turno no había manera de darle. Si le subes la dificultad ya la cosa cambia, y no se quedan todos los enemigos como idiotas.
yagg · 08/10/2014 a las 0:02
@nmlss
el nivel difícil ya trae alguna complicación más, lo estoy jugando ahora, y el héroe ya ni te digo. Como bien dicen arriba el Normal no es nada complicado, pero tiene sus cosillas. Creo que de dificultad está bien. Además muchas misiones del modo aventura, para conseguir rango A tienen tela, hay que entrenar bastante a los personajes.
ayaxsoul · 08/10/2014 a las 15:49
a la saga zelda le he bajado el pie del acelerador estos últimos tiempos… pero si hacen un dynasty warriors en el universo Fire Emblem… madre mia…
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