Mucho ha llovido desde aquel E3 del año 2010, donde anunciaron de extranjis Ocarina of Time 3D. Para muchos de nosotros no solo significaba poder jugar al aclamado juego en una consola portátil, sino la oportunidad de tener también una remasterización de Majora’s Mask: una secuela bastante peculiar y oscura lanzada en el año 2000 para Nintendo 64 que se merecía otra oportunidad. Afortunadamente, unos cuantos años después The Legend of Zelda: Majora’s Mask 3D se hizo realidad, coincidiendo con el lanzamiento de la revisión New Nintendo 3DS.
Continuando los acontecimientos de (una de las líneas temporales) de Ocarina of Time, Link se encuentra viajando a través del Bosque Perdido para reencontrarse con Navi. Durante su búsqueda, se topará con un Skull Kid poseído por la diabólica Máscara de Majora, el cual convertirá a Link en Deku. En unos instantes, el protagonista terminará en Términa: una tierra paralela a Hyrule amenazada por la caída de la Luna. Teniendo únicamente el consejo del misterioso vendedor de máscaras felices, nos abarcaremos en la misión de detener a Skull Kid y salvar al mundo una vez más, con la diferencia de que esta vez en tan solo tenemos tres días antes de que la Luna arrase con todo.
Este inusual comienzo para un Zelda es solo un adelanto de lo que nos espera en Majora’s Mask. Debido al breve tiempo de desarrollo del título original, el número de mazmorras principales se reduce a cuatro. Aunque se de trata una cantidad escasa si lo comparamos con la entrega anterior, se compensa con unas mazmorras mucho más complejas y una enorme cantidad de misiones secundarías.
Y es gracias a esto por lo que el juego realmente destaca, junto al peculiar ciclo de tres días. Teniendo un límite de 72 horas ficticias, deberemos planificar el tiempo disponible para poder completar una misión o mazmorra. Si se nos acaba el tiempo, no nos quedará más remedio que retroceder al primer día, perdiendo los objetos no esenciales (como bombas, flechas, rupias no guardadas en el banco) y parte del progreso. Puede sonar un poco duro sobre el papel, pero tendremos la ventaja de poder usar la ocarina para teletransportarnos a diferentes puntos del mapa, avanzar en el tiempo e incluso ralentizar el paso del mismo.
Este sistema cobra sentido con las misiones secundarias, las cuales consisten principalmente en ayudar a los memorables habitantes de la Ciudad Reloj. Estos personajes tienen un estricto horario durante los tres días que tendremos que tener en cuenta para poder lograr nuestros objetivos. Otro elemento vital en esta aventura son las máscaras. Entre ellas, las que usaremos principalmente son las máscaras de Deku, Goron y Zora, que nos permitirán usar nuevos métodos para desplazarnos y combatir. El resto de máscaras ofrecen nuevas habilidades o nos servirán para interactuar de forma específica con el resto de personajes.
Como todo Zelda post-OoT, Majora’s Mask tuvo una recepción inicialmente mixta entre los fans de la saga. Las principales quejas de la versión original fueron acerca del sistema de guardado, el cual solo usaba guardados temporales a no ser que reiniciáramos el ciclo de los tres días, y la dificultad para poder localizar todas las misiones secundarias sin depender de una guía.
En esta ocasión y a diferencia de Ocarina of Time 3D, la adaptación de Majora’s Mask para Nintendo 3DS no se trata de una simple mejora gráfica. Se han realizado numerosos ajustes para mejorar la experiencia del juego, empezando por el sistema de guardado. Ahora podemos salvar la partida de forma definitiva en las estatuas búho sin ninguna limitación, lo cual es perfecto para una consola portátil. El cuaderno de los Bomber ha sido totalmente remodelado, ofreciendo información mucho más detallada sobre los habitantes y también pistas para localizar nuevas misiones.
Las novedades no terminan aquí: se han realizado pequeños ajustes el diseño de la Ciudad Reloj y las mazmorras, se ha hecho más lento el nadar como Zora, se han añadido dos zonas de pesca para pasar el rato, y algún huevo de pascua, entre otros. Los jefes de las mazmorras también han sufrido un importante rediseño, con nuevos patrones de ataque y métodos para vencerlos.
El lavado de cara es impresionante comparado con la versión original. Los personajes y escenarios se muestran mucho más coloridos y detallados. La tasa de imágenes por segundo es de 30 imágenes por segundo, aunque se resiente en ciertos escenarios con el 3D activado. A pesar de esto, sigue siendo una gran mejora frente a los 17 FPS máximos de la versión europea para N64. El juego no se encuentra optimizado para las consolas New 3DS, por lo que obtendremos el mismo rendimiento que en una 3DS original. Los poseedores de la nueva revisión o del Circle Pad Pro podrán controlar la cámara del juego libremente, de forma similar a The Wind Waker.
Al igual que en Ocarina of Time 3D, se ha incluido un sistema de pistas en forma de imágenes y vídeos para los jugadores con menos experiencia. En el caso de ignorar las misiones secundarias, el juego se puede completar en algo menos de 20 horas. Por el contrario, si decidimos aprovechar todo el contenido del juego, nos costará algo más de 30 horas en completar el título.
Similar y al mismo tiempo diferente a lo que podemos esperar de una entrega 3D de esta saga, The Legend of Zelda: Majora’s Mask 3D es la oportunidad perfecta para disfrutar nuevamente este clásico. Si no jugaste al original, los cambios realizados a nivel gráfico y jugable hacen de esta versión definitiva. Si tienes mono de Zelda, no lo dudes: Majora’s Mask 3D es tu mejor opción.
8 comentarios
nmlss · 26/02/2015 a las 20:16
«la adaptación de Majora’s Mask para Nintendo 3DS no se trata de una simple mejora gráfica»
Traducción: el juego estaba tan mal hecho en todos los aspectos que han tenido que medio arreglarlo 14 años más tarde. Sigue siendo el Zelda en 3D más aburrido y tedioso de todos.
alo4)
Linkale2 · 26/02/2015 a las 20:32
Totalmente en desacuerdo con nmlss. Majora’s Mask es una gozada, quizá un zelda un poco raro, pero lo compensa con lo complejo de su mundo y sus personajes, que tienen todos un horario de cosa que hacen a lo largo de los 3 dias. Las mazmorras son lo de menos.
Para Zelda malo el A Link Between Worlds con sus mazmorras «Playskool» para tontitos, su reutilización hasta el abuso de A Link to the Past y su narrativa casi inexistente.
SrYonkykong · 26/02/2015 a las 22:33
El juego esta diseñado para TRANSMITIR, no es perfecto pero lo hace fantásticamente.
En este Zelda se puede PERDER, no simplemente ver una pantalla de game over sino ver como se desenvuelve.
Cuando no consigues hacer algo a tiempo el juego te castiga mostrandote a Anju llorando, a Kafei atrapado, a Malon con el cerebro lavado por los aliens, a la niña con el padre zombie.
Es un juego triste, pero porque en el existe la posibilidad de perder y ver la consecuencia de no hacer algo por ayudar a los demás.
@Linkale2 Seguro que te encanta esto
https://www.youtube.com/watch?v=35heznvAe2s
@nmlss Es como lo que me pasa a mi con Space Station 13 es un juego complejo, sin animaciones, con una curva de dificultad jodida y a pesar de todo eso es el juego y todo lo que surge alrededor de él es lo más interesante que he jugado en mi vida.
SrYonkykong · 26/02/2015 a las 22:34
Y sí, que el juego sea triste te motiva a actuar.
Es una genial forma de mejorar esa sensación de progreso que tiene Zelda.
yagg · 27/02/2015 a las 2:15
Para mí es el mejor Zelda de todos. Ahora lanzadme piedras buah)
SrYonkykong · 27/02/2015 a las 9:41
@yagg
Tranquilo, yo también pienso igual
Linkale2 · 27/02/2015 a las 13:32
@SrYonkykong
Me lo apunto para verlo cuando me pase el juego.
Para mí el mejor Zelda es el Skyward pero este es de los mejores.
Topofarmer · 27/02/2015 a las 16:00
Pues a mí, y aun no siendo mi Zelda preferido, me encanta. Me gusta este rollo tan diferente con respecto a otros, y la ambientación y la atmósfera del juego me parecen de 10.
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