Overwatch te pervertirá y te la pelarás como un mono

Estos días han sido moviditos con Overwatch. No porque el juego sea la polla, que lo es, sino por lo que hizo Blizzard. Básicamente fue autocensurarse, bajar la cabeza y dejar que sean otros quien decidan cómo es el juego. Y no lo hizo una vez, lo hizo dos.

Vamos con ello, aunque seguro que estáis aburridos de verlo, al menos lo más reciente con respecto a Tracer.

Primero vamos a lo más antiguo, que es una broma/Easter egg que Blizzard había colocado en Route 66, el nuevo mapa del juego. Absolutamente todos los mapas están llenos de pequeños detalles, chistes y referencias, porque eso es algo marca de la casa, y en este, un lugar en el que se esconde una banda de forajidos (entre los que estaba en su día McCree), pues también.

Hasta aquí todo normal, el problema vino cuando una de esas gracietas era esto:

Y si rompías la puerta aparecía esto:

Un par de revistas con artworks del propio juego, tanto de Symmetra como de Mercy. Algunos podrían pensar que son revistas sin más, otros que la gracia está en que los malos también se zurran la sardina, aunque sea con tías vestidas de arriba a abajo, y otros ven imágenes totalmente pornográficas o que directamente incitan a la masturbación.

El caso es que quitando a los cuatro periodistas amigos del amarillismo, nadie le dio más importancia, pero claro, proteged a los niños no sea que vean una revista en el suelo, dejen de jugar a un shooter en el que te dedicas a disparar y matar gente, y se empiecen a tocar. Ahora está así:

Luego, por si no fuera bastante evidente la tontería de Blizzard (si no te gustaba la broma, no la pongas en un principio), llega la polémica con Tracer. Desde el día que salió la versión Alpha todo el mundo está encantado con ella: es la protagonista del juego, es graciosa, una tía guay, es divertida de jugar… Hasta que hace un par de días llegó el amargado de turno a decir que si nadie piensa en los niños, en los foros oficiales del juego.

Si no os queréis tragar la chapa que suelta os la resumo: Tracer mola, Tracer es divertida, Tracer es genial, Tracer es una mujer fuerte e independiente, Tracer tiene una pose en la que se le ve el culo, y no quiero que mi niña crezca con ese modelo a seguir.

Overwatch ya de por sí es un juego bastante SJW-friendly: tiene personajes de todas las razas, con distintos tipos de cuerpos e incluso tiene a una rusa gigante con el pelo rosa y unos musculacos que ríete tú de The Rock.

No importa que haya más personajes con esa misma pose o que lleve desde el primer día de la Alpha, casualmente Blizzard estaba pensando en borrar esa pose tan pecaminosa. Ya han anunciado que va fuera, claro.

Tras esto ha sido cuando ya ha explotado el tema, con gente a favor de que quiten una pose tan provocativa de Tracer porque hay que pensar en los niños, y luego la gente que no entiende cómo Blizzard ha cambiado el juego por una queja de alguien con demasiado tiempo libre.

Si me habéis visto por Twitter creo que ya conoceréis mi opinión. No me entra en la cabeza que haya que tener gilipolleces así cada día, y lo peor, que se les de alas. Pero bueno, el doble rasero puritano está a la orden del día e Internet ha sido un altavoz para que tonterías como esta lleguen a oídos de todo el mundo. Gracias, Internet.